Parece duro, pero quien hoy no dispone de ningún acceso a internet y correo electrónico queda al margen de la sociedad, casi análogo a analfabetos. Por lo tanto es enorme la necesidad latente de tener un ordenador propio.
¿Pero que es que impide a personas de la tercera edad a dedicarse a la materia? Entre otros es el miedo de perder demasiado tiempo con el aprendizaje, tener gastos demasiado elevados y poco transparentes, ser engañados, estar a merced de alguien, parecer estúpido. La barrera de empezar es grande y crece con cada día, ya que las facultades propias disminuyen, creciendo al mismo tiempo la oferta técnica presentándose cada vez más desconcertante.
Sin embargo hay la posibilidad de contrarrestar. Hay tres conceptos que han dado buen resultado que son primero el muy citado nieto u otra persona amable y competente cerca de la persona mayor que con mucho cariño, de forma gratuita y mucha paciencia elige el ordenador, lo compra y prepara así como enseña el manejo y presta apoyo en caso de problemas. En segundo lugar son útiles grupos de pares de personas mayores, que pueden ser clubes de ordenadores, tertulias de ordenadores y muchos más. En estos grupos los mayores están entre sí y quienes tienen más conocimientos que los demás, se lo enseña. El tercer lugar ocupan cursos de informática ofrecidos en algunos lugares por los ayuntamientos pero también por escuelas especializadas. Aunque estos cursos a la primera vista parezcan caros, por regla general suelen hacer valer su dinero.
Lo que no ha dado resultado en absoluto es la compra de cualquier ordenador para probar lo que se puede hacer con él. El primer contacto y comienzo con el ordenador propio efectivamente resulta ser tan complicado que no se aclarará nadie sin ayuda. Tampoco libros sobre el tema prestan mucha ayuda pues no suelen ser muy específicos y a menudo tampoco actuales.
Una vez superados los primeros pasos y perdidos los miedos al contacto, una de las primeras acciones seguramente será la instalación de una dirección de correo electrónico y luego la gran aventura de navegar por el internet.
Confiando en la agilidad y curiosidad de las personas mayores recientemente se ha creado la nueva página web actionforhealthyageing.eu. Se trata de un proyecto europeo explicitica mente creada para las personas interesadas en los procesos de envejecimiento y más mediante de las tecnologías de la información y la comunicación.